Netatmo y Somfy anuncian la compatibilidad del Termostato y de las Válvulas Termostáticas inteligentes con la Box conectada TaHoma
En nuestro país, al contrario de lo que ocurre en otros territorios de la UE, no hay una regulación clara y precisa que obligue a instalar una alarma de incendios (fire alarm) en las viviendas. Sin embargo, la eficiencia de estos pequeños dispositivos, que pueden salvar los bienes y la vida, están más que demostrados. A esto hay que unir su precio asequible y fácil mantenimiento. A pesar de todo ello, la instalación de los detectores o alarmas contra incendios se deja al sentido común de cada uno. O como máximo, a que el arquitecto considere oportuno su instalación al realizar el proyecto de la vivienda.
Cuando hablamos de detectores de humo, estamos haciendo referencia a unos pequeños dispositivos que, como mínimo son capaces de hacer dos cosas:
Estos son los equipos de seguridad antiincendios más básicos, para viviendas particulares e instalaciones o empresas:
Como hemos señalado, en nuestro país no es obligatorio instalar detectores de humo en las casas, aunque todos deberíamos hacerlo, como medida de precaución.
En este tipo de instalaciones sí es obligatorio instalar detectores de humo y también un completo sistema de seguridad de prevención contra incendios. El sistema de seguridad deberá incluir diferentes elementos: extintores, sistema de evacuación de humo, plan de evacuación, puertas corta fuegos, materiales ignífugos, o alarma de incendio visual.
En el caso de las viviendas particulares, instalar un detector es realmente fácil y rápido.
También hay detectores magnéticos que se fijan al techo o pared sin necesidad de clavos, tornillos ni taladros.
Por lo general, una alarma de incendio de buena calidad puede tener una vida útil de hasta 10 años. Pasado ese tiempo se recomienda cambiar el dispositivo. La horquilla de precios de los detectores de buena calidad puede oscilar entre los 40 y los 80 euros.
Este elemento de seguridad puede salvarnos la vida. De ahí su importancia al elegir el modelo adecuado. Evidentemente, es fundamental comprar un dispositivo de buena calidad, que ofrezca un buen nivel de eficacia.
Como norma general, hay que tener en cuenta varios requisitos antes de adquirir el detector:
Los extintores son el complemento lógico de los detectores de humo. Disponer de estos elementos puede ser crucial para atajar el fuego antes de que se extienda:
La cocina es el lugar en el que más habitualmente se producen incendios domésticos.
Aunque parezca una obviedad, saber cómo abandonar la vivienda en caso de incendio es fundamental. En el caso de las viviendas particulares, que suelen tener como máximo un par de plantas, la evacuación puede hacerse con mayor rapidez.
En el caso de un edificio comunitario, resulta esencial conocer el plan de evacuación y las salidas de emergencia.
Los detectores de humo anti incendios se deben reemplazar como máximo, cada 10 años. Un piloto luminoso indica el funcionamiento de la alarma contra incendios. Sin embargo, es importante realizar un control de la alarma de forma periódica. Por ese motivo hemos dotado a nuestro detector de humo inteligente con una función de auto test.
Esta función le permite controlar por sí mismo su buen estado de funcionamiento para realizar la detección y protección contra incendios de forma eficaz: envía un aviso al móvil del usuario a modo de recordatorio para que éste verifique que el mecanismo funciona de forma correcta. Esta verificación se puede hacer desde el móvil o bien de forma manual.
Nota: En caso de producirse alguna falsa alarma (aceite que se quema o algo demasiado cocinado en el horno, por ejemplo), se puede apagar el dispositivo desde el móvil, sin necesidad de tener que subirse a un taburete o escalera.