¿Por qué instalar un detector de monóxido de carbono?

Miles de personas se intoxican todos los años por inhalación de ppm de monóxido de carbono (CO). Esto podría haberse evitado fácilmente con un simple y funcional detector de monóxido de carbono, un gas tóxico incoloro, inodoro, insípido y no irritante, imperceptible para los sentidos. Instalar un detector de este tipo de gas, equipado con una alarma, puede salvarnos la vida.

¿Qué es un detector de monóxido de carbono?

El detector de monóxido de carbono es un sistema de seguridad muy utilizado en la actualidad en el interior de los hogares. Este pequeño dispositivo está equipado con una alarma que emite un sonido estridente tan pronto como detecta que se ha sobrepasado el umbral de concentración de monóxido de carbono en la habitación.

Simplemente hay que conectar el detector de monóxido de carbono al sensor para que pueda analizar continuamente el aire ambiental. Para que la detección sea lo más eficaz posible, lo ideal es colocarlo en la misma habitación que el aparato de combustión, si es posible a una distancia de entre 1 y 3 metros en horizontal. Dada la peligrosidad del monóxido de carbono, se recomienda

instalar un detector de monóxido de carbono si en la vivienda utilizamos un dispositivo de combustión, como calefacción térmica, estufa de gas o chimenea de gasoil.

Colocar los detectores de monóxido de carbono no es obligatorio. Sin embargo, es muy recomendable ya que son realmente eficaces como sistema de aviso, y para garantizar la tranquilidad en el día a día. Además, incluso aunque no tengamos aparatos que puedan emitir CO, también puede servirnos de ayuda para avisarnos de un escape en las casas vecinas, antes de que el gas se propague.

Una vez instalado el detector de monóxido de carbono, no es necesario realizar ningún tipo de mantenimiento. Basta con revisarlo una vez al año y comprobar que la pila está completamente cargada.

¿Por qué el monóxido de carbono es un gas peligroso para la salud?

Para saber realmente todo sobre el detector de monóxido de carbono, es importante saber qué es este gas.

¿Qué es el monóxido de carbono?

El monóxido de carbono (CO), no debe confundirse con el dióxido de carbono (CO2). El CO es un gas que no vemos ni olemos, pero que resulta tóxico o incluso potencialmente mortal, por falta de oxígeno, cuando se encuentra en altas concentraciones en un espacio cerrado, o por inhalación prolongada. En este artículo estamos hablando de la versión gaseosa de la molécula compuesta por un átomo de carbono (C) y un átomo de oxígeno (O).

Puede emanar tanto de la combustión de madera, como de gases como el butano, propano, gas natural, carbón e incluso derivados del petróleo como la gasolina o el fuel oil.

Por esta razón, no son solo los aparatos de calefacción los que pueden causar las emisiones de carbono. También los coches, motos, generadores, chimeneas o braseros las pueden generar. Por esa razón, debería haber detectores de monóxido de carbono en casi todas las habitaciones de la casa.

Pero no todas las combustiones producen monóxido de carbono. De hecho, este gas se genera por la combustión incompleta del combustible. Es decir, por una combustión "mala" que puede ser provocada por el uso inadecuado del equipo de combustión, o bien por falta de mantenimiento de los conductos de escape. Los electrodomésticos y calentadores envejecidos o con un mantenimiento insuficiente también pueden causar emisiones de monóxido de carbono.

El monóxido de carbono es la principal causa de intoxicación en países industrializados

Si este gas supone un problema es porque además de nocivo, se difunde rápidamente por la atmósfera. Por eso ha sido durante mucho tiempo la principal causa envenenamiento en países industrializados. Tan pronto como se inhala, el monóxido de carbono reemplaza rápidamente el oxígeno en la sangre, provocando dolores de cabeza, mareos, náuseas, vómitos o incluso pérdida de conciencia.

Ante el más mínimo de estos síntomas debemos ponernos en alerta, especialmente si estamos usando una caldera u otros aparatos de combustión en el hogar. El monóxido, altamente tóxico, es el causante más habitual de accidentes por inhalación durante el período invernal (en general, de septiembre a marzo). De ahí la importancia de instalar un detector de monóxido de carbono en casa antes del invierno, para poder ser alertados por su alarma ante el menor riesgo.

¿Cómo funcionan los detectores de monóxido de carbono, a diferencia de los detectores de humo?

El detector de gas monóxido de carbono no es un detector de humo. El humo y el monóxido de carbono son diferentes tipos de elementos, y estos son analizados por diferentes tipos de sensores.

El funcionamiento de un detector de monóxido de carbono, que emite una alarma tan pronto como este gas se detecta en una cantidad demasiado elevada, se basa en mecanismo electroquímico.

En la práctica, una solución química, colocada dentro del dispositivo, reacciona al contacto con el gas monóxido de carbono cuando éste alcanza un determinado nivel de concentración. Esto hace que se active una alarma sonora que sirve de alerta para poner de manifiesto la presencia del gas, indetectable para los sentidos humanos.

El aparato de detección del monóxido de carbono es, por tanto, un producto eficaz, un verdadero sistema de seguridad, equipado con un sensor de alto rendimiento que brinda protección contra el riesgo de incendio o de envenenamiento por gas.

El sonido de alarma de un detector de monóxido de carbono es diferente al de un detector de humo, lo que permite diferenciarlos. Al igual que ocurre con los dos tipos de dispositivos, que alertan sobre la presencia de humos o gases.

¿Cómo elegir el mejor detector de monóxido de carbono?

Detector de monóxido de carbono digital y pantalla lcd, detector de monóxido autónomo, de diseño, fiable, asequible, con cable o inalámbrico, a pilas o con batería…

Por su precio, características, diseño… Hay multitud de opciones a la hora de elegir un detector de monóxido de carbono. Los hay para todos los gustos, y la mayor parte de ellos son económicos y muy eficaces.

Cada producto es diferente, aunque algunos modelos conectados e inteligentes ofrecen una mejor detección y una protección más completa. La mayoría de las marcas ofrecen una descripción detallada de sus detectores.

Para elegir el producto que mejor se adapte a nuestras necesidades, entre los diferentes dispositivos, basta con realizar una búsqueda general. Hay multitud de modelos de detectores de monóxido de carbono a la venta. Todos ellos son relativamente similares y todos ellos sirven para incrementar el nivel de seguridad contra el monóxido de carbono.

El mantenimiento regular de los equipos y electrodomésticos de calefacción es un requisito previo para combatir el riesgo de intoxicación por monóxido de carbono. Además de eso, lo más importante es equiparse con un detector de monóxido de carbono, que, gracias a su sensor, ofrezca un nivel máximo de seguridad y protección real contra este gas nocivo.