¿Para qué sirve un termostato inalámbrico?
Un termostato inalámbrico es un aparato sin cables que sirve para regular la temperatura del interior de la vivienda, de forma práctica y precisa. Este tipo de termostato de ambiente se diferencia del termostato con cable en el hecho de que a este último hay que instalarlo directamente en la caldera o el sistema de calefacción. Por tanto, el termostato inalámbrico es más práctico y también más eficaz y ventajoso.
Con un termostato inalámbrico la calefacción podrá generar una temperatura perfecta y conseguiremos un importante nivel de confort en la vivienda. Al invertir en un termostato inalámbrico estamos apostando por una calefacción perfectamente regulada y adaptada a nuestras necesidades reales. El consumo de energía será menor ya que evitaremos sobrecalentar inútilmente y eso al final, se notará en una mejor eficiencia y en un menor importe en la factura.
- Podremos controlar el calor emitido por los radiadores y regular la caldera con la mayor precisión, por grados e incluso por medios grados. Es conveniente instalar un termostato inalámbrico en cada sistema de calefacción o calderas individuales o colectivas: calefacción de gas, estufa de leña, bomba de calor, caldera de gasoil, etc.
- Conseguiremos una temperatura perfecta, reduciendo el consumo y la factura de energía.
Con el termostato inteligente Netatmo podemos disfrutar de una regulación de temperatura milimétrica en nuestra calefacción. Un accesorio imprescindible para controlar y programar a distancia la temperatura de cada pieza para conseguir el máximo confort de forma duradera.
Tipos de termostatos inalámbricos
Existen 3 grandes tipos de termostatos inalámbricos: termostato inalámbrico no programable, termostato inalámbrico programable y termostato inteligente inalámbrico.
Termostato inalámbrico no programable
El modelo de termostato más antiguo, más barato, y, obviamente, menos eficaz es el termostato inalámbrico no programable. En estos modelos no hay pantalla digital, no hay un control preciso y no hay posibilidad de programar. Este tipo de termostato solo sirve para regular la temperatura de cada estancia de forma manual gracias a un receptor que va fijado a la caldera. El termostato inalámbrico no programable no precisa ninguna instalación en particular.
Aunque el ahorro de energía que conseguimos con un termostato inalámbrico no programable no es demasiado alto comparado con otros modelos, no deja de ser una opción interesante para presupuestos limitados.
Termostato inalámbrico programable y electrónico
Más ventajoso que los modelos no programables ya que con el termostato inalámbrico programable conseguiremos un mayor ahorro de energía. El confort térmico también será excelente ya que el controlador de temperatura del termostato se encargará de regularla de forma muy precisa. Bastará con programar el termostato inalámbrico para ajustar la calefacción en función de nuestras necesidades y así conseguir la temperatura deseada en cada habitación.
Los termostatos programables inalámbricos también proporcionan una información muy precisa a través de su pantalla digital. Hay muchos modelos entre los que elegir el que mejor se adapte a nuestras necesidades para regular la calefacción de forma económica y duradera. Este tipo de termostatos tampoco necesitan instalación.
Termostato digital inalámbrico y programable
El termostato digital inalámbrico es el modelo más evolucionado tecnológicamente, el que ofrece un mejor rendimiento, el que nos permitirá conseguir un mayor ahorro a largo plazo y también el que tiene un precio más elevado. Esta joya de la domótica, más precisa que el termostato inalámbrico programable, ofrece un nivel de regulación que va más allá de la simple programación manual ya que también es “inteligente”.
Una vez conectado al sistema de calefacción central o a la caldera, por una parte, y a la wifi por otra, se adapta a nuestro ritmo de vida y a nuestras preferencias y garantizando un óptimo nivel de temperatura para cada parte de la casa.
Con un termostato inalámbrico digital podremos decidir la temperatura de cada estancia en cada momento del día. Este tipo de termostatos es el que proporciona un mejor nivel de confort térmico.
El termostato inalámbrico inteligente Netatmo es un aparato digital e inalámbrico con el que podremos conseguir un importante ahorro de energía. Con este termostato digital podremos reducir la factura de la calefacción y disfrutar de una temperatura perfecta en toda la casa. ¡Además, podremos controlarlo desde el móvil!
¿Cuánto cuesta un termostato inalámbrico?
La mayoría de termostatos son modelos inalámbricos de una extensa gama de precios. Sea cuál sea su precio, el termostato inalámbrico sigue siendo una buena inversión que nos permitirá ahorrar energía y reducir el importe de la factura de calefacción.
El modelo más básico es el termostato inalámbrico no programable. Su precio de venta puede llegar a unos 100 euros como máximo mientras que el termostato inalámbrico programable se vende a partir de esa cantidad. En cuanto a los termostatos digitales inalámbricos, sus precios suelen oscilar entre los 150 y los 250 euros de media. Algunos modelos de alta gama pueden superar fácilmente los 400 euros, aunque no es necesario desembolsar semejante cantidad para conseguir un termostato de gran calidad.
Lo más recomendable es elegir siempre en función de nuestras necesidades y presupuesto. ¡Sin duda, encontraremos el termostato perfecto! Antes de comprar, hay que elegir bien para estar seguros de que es el modelo que necesitamos y no hacer un gasto inútil.
El termostato inalámbrico es un excelente modo de reducir el consumo de energía y la factura, al tiempo que mejora el confort en cada parte de la vivienda. Estos termostatos inalámbricos, muy prácticos y fáciles de controlar y manejar, poco a poco se van imponiendo en las viviendas y apartamentos. Programables, con control de temperatura, electromecánicos, digitales o manuales. Los termostatos inalámbricos son una auténtica inversión. ¡Ya solo falta nos elegir nuestro modelo de termostato para empezar a disfrutar de todas sus ventajas!
