Consejos para mejorar la eficiencia energética en el hogar

Mejorar la eficiencia energética de edificios y viviendas es el mejor modo de reducir nuestro consumo de energía y, por consiguiente, las facturas del agua caliente. Para ello hay que realizar un buen aislamiento y contar con un sistema de calefacción y equipos eficientes. Entonces, ¿por dónde empezar para optimizar nuestra eficiencia energética y limitar al máximo las fugas y pérdidas de energía? ¿Qué es la certificación de eficiencia energética? ¿Qué ayudas financieras existen en España para ello?

¿Qué es la eficiencia energética de una vivienda?

La noción de eficiencia energética referida al ahorro de energía en edificios y viviendas tiene que ver con el tema económico. La eficiencia energética es, en principio, un término que se refiere al funcionamiento de un sistema que le permita realizar un menor consumo energético por un mismo servicio.

Tanto en las viviendas particulares como en los edificios, mejorar la eficiencia implica una serie de esfuerzos para reducir el consumo energético. Esto se suele conseguir simplemente consumiendo menos. ¡Tan fácil como eso! Aunque como bien sabemos, una cosa es la teoría y otra la práctica.

Consumir menos es un gesto ecológico ya que contribuiremos a limitar las emisiones de gases de efecto invernadero y un ahorro en las facturas. Y todo ello gracias a un consumo mejor gestionado y a una utilización más inteligente de los recursos.

¿Por dónde empezar?

El aislamiento de los tejados, paredes y ventanas para limitar las pérdidas de energía

En lugar de sobrecalentar nuestros hogares, con el consiguiente aumento del consumo que ello supone, es preferible calentar mejor, utilizando el mismo calor, aunque de forma más eficiente. Hasta un 30% de la calefacción puede filtrarse por los tejados. Por eso, el aislamiento de techos y tejados debería ser el punto de partida para mejorar nuestra eficiencia energética. Hay que elegir un material aislante de calidad, y una técnica adaptada a nuestra vivienda, necesidades, sensibilidad ecológica y presupuesto.

El aislamiento de las ventanas también es importante para evitar las fugas de energía. Tanto para tejados como para las ventanas el aislamiento es una buena opción para disminuir el consumo.

Un buen aislamiento de la vivienda o edificio evitará las fugas y desperdicio tanto de energía como de dinero, con un sistema de calefacción (o de climatización en verano) que directamente se escapa por techos y ventanas. Una vez que ya tenemos un buen aislamiento, es hora de pasar al sistema de calefacción.

Optar por un sistema eficiente de calefacción y agua caliente sanitaria.

¿Sabía que la calefacción puede suponer hasta un 77% del consumo de energía, y de hasta un 12% de la producción de agua caliente sanitaria de una vivienda? Son cifras muy importantes, debido a que la eficiencia energética de los edificios depende en buena parte del sistema de calefacción y agua caliente que tengamos.

Entre un sistema eficiente y una calefacción que consume mucho y calienta poco hay una diferencia abismal tanto a nivel ecológico como económico y energético. Elegir el sistema de calefacción adecuado permite un considerable ahorro de energía y, por tanto, de la factura. Junto al aislamiento, elegir un buen sistema de calefacción sostenible es la mejor forma de reducir el consumo de energía y ser más eficientes.

¿Qué sistema de calefacción y agua caliente sanitaria elegir para lograr una mejora en nuestra eficiencia energética?

Elegir preferentemente:

  • Un sistema de calefacción reciente, de menos de 15 años de antigüedad
  • Un sistema de calefacción de uso y mantenimiento económico con alta calificación de eficiencia energética
  • Una caldera, suelo radiante o bomba de calor que se adapte a nuestras necesidades
  • Soluciones eficientes y tecnológicamente avanzadas
  • Una energía abundante, verde, limpia y renovable como el sol, el aire o la biomasa
  • Equipos como una bomba de calor o caldera de condensación con certificado de eficiencia energética, de “baja temperatura” o de microgeneración, y calentador termodinámico.

Es necesario hacer una inversión, aunque podemos acogernos a subvenciones y ayudas. En España, se puede acceder a diferentes ayudas estatales para disminuir el coste de las instalaciones. Entre ellas, está el llamado crédito para la eficiencia energética, que ofrece unas condiciones muy ventajosas, bajos tipos de interés y una gran flexibilidad.

La transición energética es una buena oportunidad para mejorar la eficiencia energética de los edificios. ¡Merece la pena aprovechar este tipo de ayudas para incrementar la rentabilidad de nuestro dinero!

El termostato conectado, un gran aliado de la eficiencia energética

Para convertir nuestra calefacción en un sistema más eficiente y mejorar más aún la eficiencia energética de la vivienda, un termostato ambiental conectado puede resultar realmente eficaz. Se trata de un dispositivo muy práctico para controlar y programar los radiadores y dar la temperatura adecuada a cada pieza de la casa.

Esto supone un mayor ahorro energético, garantizando un excelente confort térmico y un considerable ahorro económico.

El termostato inteligente Netatmo es un termostato de ambiente conectado que funciona con cualquier tipo de calefacción central. Su instalación es fácil y rápida, y nos permitirá optimizar el nivel de eficiencia energética gracias a un consumo controlado.

Consejos importantes para ser más eficientes

Una vez que hemos aislado nuestra vivienda y elegido un sistema eficiente para el agua caliente sanitaria y la calefacción, hay algunos trucos para la mejora de la eficiencia energética del edificio:

  • Revestir las cañerías de agua caliente para evitar fugas de energía
  • Utilizar un inserto en la chimenea
  • Consumir menos y evitar tener la calefacción encendida cuando estamos ausentes
  • Realizar un diagnóstico de rendimiento energético (DRE) para detectar los puntos débiles de los edificios y ponerles solución
  • Tener en cuenta la calificación energética de los aparatos eléctricos. Invertir en electrodomésticos de nueva generación, con certificado de eficiencia o etiqueta energética de bajo consumo
  • Usar el horno con precaución ya que es el aparato que más energía consume y optar preferentemente por un horno de calor rotatorio, o bien por el horno combinado con el microondas.
  • No descuidar el mantenimiento de la caldera y el resto de instalaciones de la calefacción ya que es el mejor modo de que ofrezcan el mejor rendimiento posible
  • Reducir la temperatura o apagar la calefacción por la noche.

Hacer un consumo de energía eficiente es importante tanto en el hogar (ya que supondrá un considerable ahorro en la factura), como para el planeta (ya que reduciremos las emisiones de gases de efecto invernadero). Por ello, es muy recomendable obtener información para realizar las reformas necesarias a fin de mejorar la eficiencia energética de nuestros hogares y edificios. En España cada comunidad autónoma ofrece ayudas para animar a los usuarios a hacer las obras necesarias para la transición energética y el uso de energías renovables. Los edificios poco eficientes son contaminantes, aumentan la emisión de gases invernadero y suponen un coste inmenso tanto a nivel económico como ecológico.