Sistema de Alarma con Vídeo Inteligente
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Inteligencia artificial
Se denomina inteligencia artificial o IA a las tecnologías cuyo objetivo es reproducir los procesos cognitivos humanos. En el origen de la disciplina, se trataba de dotar a los robots de una inteligencia propia. En realidad, la inteligencia artificial se basa sobre todo en las matemáticas. Los algoritmos y programas informáticos permiten a las máquinas simular la inteligencia humana en la resolución de problemas y el aprendizaje de nuevas habilidades.Incipiente en los años 60, la inteligencia artificial está cada vez más presente en nuestra vida cotidiana y los campos de aplicación se han multiplicado en los últimos años.
Algunos ejemplos de aplicaciones de la inteligencia artificial
La investigación está desarrollando constantemente nuevas perspectivas para la inteligencia artificial. Ya utilizada en el trading algorítmico, en el diagnóstico médico, en la industria o en el mercado de automóviles autónomos, la inteligencia artificial utiliza los datos que se le proporcionan y mejora gradualmente su procesamiento. Así pues, por ahora no se trata tanto de sustituir al ser humano como de optimizar el uso de las bases de datos existentes.Sin embargo, las grandes empresas de informática están invirtiendo cada vez más en el uso de estas máquinas capaces de aprender y su autonomía debería seguir mejorando gracias a las neuronas artificiales con las que están equipadas. Empresas como Apple, Google o Microsoft predicen así la omnipresencia de estas máquinas inteligentes junto a los seres humanos en los próximos años.
Más allá del trabajo de investigadores y científicos, las aplicaciones prácticas más obvias en nuestra vida diaria son probablemente los asistentes de voz inteligentes integrados en nuestros smartphones, ordenadores o altavoces domésticos. Las empresas que los comercializan (Google, Amazon, Samsung, Microsoft…) utilizan el reconocimiento de voz y el análisis de los datos personales de los usuarios para ofrecer asistentes virtuales de bolsillo capaces de realizar tareas online bajo demanda, ofrecer servicios personalizados o interactuar con objetos inteligentes en el hogar. Por tanto, Siri, Alexa o Cortana, aunque virtuales, son los primeros robots domésticos equipados con inteligencia artificial para interactuar con los humanos a diario.
Parece ciencia ficción, pero en realidad, los robots han estado en nuestras vidas desde hace algún tiempo, sin que los consideremos como tales. Piense en el algoritmo de reconocimiento de imágenes del buscador Google, las redes sociales que muestran el contenido de acuerdo a algoritmos que miden la interacción de las publicaciones, o incluso más simplemente su antispam que cada vez reconoce mejor los correos electrónicos no deseados gracias a su capacidad de aprendizaje. En Internet, la inteligencia artificial es una de las tecnologías ya bien establecidas. Descubre todos nuestros productos
Problemas éticos que plantea la inteligencia artificial
Como todos los avances en la investigación científica, el desarrollo de la inteligencia artificial va acompañado de temores para los humanos.La idea de una máquina con un cerebro que imita al humano y una capacidad de aprendizaje similar o incluso mayor no está exenta de problemas. Si bien esto parece utópico en este momento, los investigadores no excluyen con el tiempo el desarrollo de algún tipo de conciencia robótica que los ponga en pie de igualdad con los humanos. ¿No escaparían de todo control las máquinas equipadas con inteligencia artificial, una vez que fueran autónomas y conscientes? Esta es una teoría que ha alimentado la imaginación de los escritores de ciencia ficción durante mucho tiempo.
Pero más allá de estos temores, que los científicos consideran infundados debido a la complejidad de reproducir el funcionamiento de las sinapsis del cerebro humano y del pensamiento humano, surgen verdaderas cuestiones éticas y de seguridad.
- Sustitución del hombre por la máquina en el ámbito laboral
Entre las amenazas que plantea el desarrollo de la inteligencia artificial, la primera es la sustitución del hombre por la máquina en las empresas. Es cierto que muchas de las tareas realizadas hasta ahora por los seres humanos serán automatizadas. Por tanto, el trabajo humano bien podría ser reemplazado por una computadora o por máquinas equipadas con inteligencia artificial.
Sin embargo, no hay que olvidar que la robotización y el desarrollo de la inteligencia artificial crearán puestos de trabajo. Además, en Francia, los investigadores de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico) afirman que solo el 9 % de los trabajadores franceses están realmente afectados por el riesgo de ser sustituidos por una máquina equipada con IA. Sabiendo que la inteligencia artificial también puede conducir a un aumento significativo de la productividad y mejorar las condiciones de trabajo de muchas personas, la relación entre el riesgo para el empleo y los beneficios de estas nuevas tecnologías para los trabajadores franceses es mínima. - Inteligencia artificial, datos y privacidad
Por este motivo, la Unión Europea y la OPECST (Oficina Parlamentaria de Evaluación de las Opciones Científicas y Tecnológicas de la República francesa) ya están trabajando en una ley de robótica. Se trata de una legislación para regular los derechos y deberes de las máquinas dotadas de inteligencia artificial y para definir su posible responsabilidad legal. Leyes que también protegerían mejor los datos personales y la privacidad humana, pero también la propiedad intelectual.
- Riesgos relacionados con los algoritmos